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Fotografía: Ricardo Espinosa Ibeas. Prohibida su reproducción total o parcial sin el consentimiento expreso del autor
Los antecedentes del Aeródromo de Barberán y Collar hay que buscarlos en el Aeródromo del Campo del Ángel situado también en la madrileña ciudad de Alcalá de Henares.
Dada la importancia, tanto civil como militar, que estaba tomando la aeronáutica, en otoño de 1913 se inauguró el Aeródromo del Campo del Angel junto a la carretera de Daganzo. Llamado así porque en la zona estuvo la ermita del Santo Ángel de la Guardia. El aeródromo no contaba con una pista de aterrizaje, tal y como las conocemos hoy, sino con una amplia explanada de unos 600 por 700 metros en la que la dirección del despegue variaba dependiendo del viento. La explanada era lo suficientemente amplia para los antiguos aeroplanos de aquella época, que sólo precisaban de unos 300 metros para despegar. El aeródromo era usado tanto por el Ejército de Tierra como por la Armada para adiestrar a sus pilotos, en el que entre otros se formó Joaquín Collar Serra. El Ejército del Aire todavía no había sido creado.
Con el paso del tiempo el aeródromo se quedó pequeño, clausurándolo en 1934 para construir otro cerca de Alcalá de Henares. En la actualidad, la zona está totalmente urbanizada y el tramo del aeródromo es la calle Torrelaguna. Como monumento para el recuerdo el Ayuntamiento de Alcalá solicitó al Ministerio de Defensa un avión cazabombardero Phantom F-4 de los que se encuentran en desuso en la Base Aerea de Torrejón de Ardoz para ser colocado en una rotonda de la Avenida de Daganzo, pero no se ha materializado.
Aeródromo de Barberán y Collar
En unos terrenos al noreste de Alcalá se construyó el nuevo aeródromo llamado de Barberán y Collar, en recuerdo de los pilotos españoles Mariano Barberán y Joaquín Collar Serra, desaparecidos sobre México a bordo del sesquiplano «Cuatro Vientos»». Era una Escuela de Vuelo y Combate de la aviación militar; y constituía la cabecera de la 1ª Región Aérea de la Aeronáutica militar, que comprendía las provincias de Madrid, Toledo, Cuenca y Guadalajara.
Durante la Guerra Civil (1936-1939) el aeródromo se convirtió en una importante base soviética, con un papel fundamental en la defensa de Madrid. Desde el 5 de noviembre de 1936 se convirtió en base de los cazas Polikarpov-15, conocidos como «Chatos». El aeródromo y la ciudad sufrieron numerosos bombardeos. En el aeródromo permanecían dos escuadrillas de cazas, una en estado de alerta, con pilotos y mecánicos equipados junto al avión. Al sonar la alarma despegaban de inmediato con la misión de evitar los bombardeos. La defensa aérea de Madrid era eficaz durante el día, pero no durante la noche, momentos en los que aprovechaban para los bombardeos. El grupo estaba integrado por Viktor Kuznetsov como jefe,Leonid Rivkin, Vladimir Srokin, Anatoli Serov y Mijail Yakushin, estos dos últimos pilotos organizaron un grupo de cazas nocturnos en el aeródromo de Alcalá. Para iluminar la pista se dispusieron faros de coches y se encendieron hogueras a lo largo de la pista. El 25 de junio de 1937 tuvo lugar la primera misión nocturna.
En julio de 1937 llega desde Moscú la primera promoción de pilotos españoles adiestrados en el manejo de estos cazas, hasta entonces pilotados principalmente por soviéticos. Los alumnos, elegidos entre los mejores combatientes de frente, permanecían durante unos 6 meses en la URSS. Según las aptitudes o preferencias de los alumnos, eran instruidos y obtenían el título de piloto, observador, bombardero o ametrallador.
En 1939, el recién creado Ministerio del Aire elige Alcalá para situar la primera Academia. En 1943 se empiezan a construir los hangares y un edificio junto a las vías del tren para albergar la academia; con las obras no terminadas se tomó la decisión de ubicar la academia en San Javier (Murcia).
En marzo de 1946 se crea la 1ª Bandera de la Legión de Tropas de Aviación. En septiembre del mismo año la unidad se ubicó en el aeródomo, en el edificio que estaba inicialmente destinado a la Academia General del Aire. El edificio se encontraba en aquel momento en muy mal estado, al no haberse acabado su construcción, careciendo de puertas o ventanas. El 10 de abril de 1948, después de haber sido trasladada provisionalmente, la Unidad, renombrada como 1ª Bandera de Paracaidistas de Aviación, regresa a sus nuevas instalaciones de Alcalá. Estas instalaciones quedarían en 1954 como sede de la BRIPAC, la primera unidad paracaidista del Ejército de Tierra.
El cierre del aeródromo se produjo el 3 de diciembre de 1965. No obstante se mantuvo una guarnición del Ejército del Aire, para usarlo como almacén y dependencias auxiliares, hasta el 28 de diciembre de 1968, cuando el Ministerio del Aire cede el aeródromo de 240 hectáreas para su uso como campus universitario al Ministerio de Educación.
Tras el regreso de la Universidad de Alcalá en 1975, se utilizaron los terrenos del antiguo aeródromo para albergar el campus universitario.
Fotografía: Ricardo Espinosa Ibeas
Fuente: Wikipedia