(IyJ) No se puede definir de otra manera. La guerra ha estallado en el Ayuntamiento. El pasado Abril ya publicamos los primeros escarceos. Hoy se ha declarado oficialmente la guerra. Por la mañana, la junta de gobierno local ha aprobado “intervenir” de manera directa y establecer una serie de modificaciones sobre el convenio que en la práctica, supone actualizar unilateralmente las nuevas condiciones de trabajo. La razón, bastante sencilla; el comité de empresa no ha llevado a cabo demasiados gestos de acercamiento.
El pincipal motivo de desencuentro estriba en el hecho de que el comité de empresa se niega en rotundo a dejar escapar el complemento de disponibilidad, un complemento de unos 200€ prebendado con ligereza por Bartolomé González en los años de la burbuja económica. Durante la campaña de las elecciones locales de Mayo del año pasado, este complemento fue objeto de numerosas críticas en los programas electorales de diversas formaciones, ya que lo consideraban como una dádiva que suponía crear un voto cautivo entre los empleados municipales y sus familiares. Durante la pasada legislatura, el desembolso de dinero en éste complemento supuso para las arcas municipales un gasto cercano a los 16 millones de euros.
La reacción no se ha hecho esperar, aunque ciertamente ya estaba preparada desde la semana pasada. Esta tarde, un grupo de entre 300 y 400 personas se ha manifestado por el centro de Alcalá de Henares, partiendo desde la plaza Cervantes, repartiendo octavillas que comprometen en cierta manera, determinadas actuaciones de la actual/anterior corporación municipal.
En esas octavillas, los empleados municipales critican cierto descontrol en la gestion de los gastos por parte de la corporación, en concreto y de manera expresa las octavillas hacen referencia a 200.000€ en horas extras que el equipo de gobierno reparte o ha repartido entre determinados “allegados”, así como a los gastos de promoción/publicidad en que incurre la corporación.
Ésta partida de gasto promocional siempre ha sido muy polémica. Hasta el pasado Marzo en que se pacto una cantidad que excede ligeramente del millón de euros, esta partida se acercaba a los dos millones anuales – 8 millones de euros durante la pasada legislatura-. Es un gasto que es de disposición directa por parte de alcaldía, y que los medios de comunicación no afines a Bartolomé González critican con frecuencia, ya que consideran que el Alcalde de Alcalá utiliza éste dinero para recompensar y paniaguar de manera arbitraria a su prensa leal, ignorando al resto de los medios locales, con la única finalidad de darse autobombo y propaganda propia. Esa es la explicación que facilitaban las octavillas repartidas ésta tarde por los manifestantes.
En cualquier caso se puede considerar como iniciada una guerra de la cual ésta ha sido la primera batalla. Ambas partes consideran la negociación abierta ya que ni unos ni otros han cerrado la puerta a continuar con las negociaciones.