Muy revueltas andan las aguas políticas de alcalandia. Y es que la sorpresiva oferta de Anselmo Avendaño pidiendo auxilio al resto de las fuerzas políticas de la ciudad para crear un gobierno de salvación local, ha pillado con el paso cambiado a no menos de uno

La oferta del líder de UPyD ha sido franca y sincera, pero no se ha encontrado con la respuesta esperada en el resto de los actores. El PSOE ha cogido el pañuelo, pero se ha encontrado con que la otra fuerza de izquierdas de la corporación, ha hecho la callada por respuesta, o mejor aún, la respuesta al ofrecimiento magenta ha consistido en chillidos destemplados y ninguneos por parte de Pilar Fernández, líder de la coalición en la ciudad. Según Pilar Fernández, su “experiencia en la corporación”, es un grado del que carece Anselmo Avendaño.

En verdad que la líder de IU tendría que hacerse una “foto”, y aclarar las razones por las cuales no considera razonable el ofrecimiento de Anselmo Avendaño. A éstas alturas de la jugada a nadie se le escapa que existe un pacto no escrito entre Populares e IU. Y es un pacto no escrito, porque es la única manera de no tener que dar explicaciones ni a los jefes, ni mucho menos a los votantes que pondrían en cuarentena la credibilidad de un supuesto gobierno conservador, soportado por un partido en el extremo opuesto del arco ideológico.

Mientras tanto, las fuerzas democráticas, siguen poniendo el bozal a los más de 4500 alcalaínos que depositaron su confianza en España 2000. El tiempo dirá si la actitud adoptada por el resto de los grupos políticos es la correcta, o por el contrario pasa factura en 2015.